domingo, 19 de diciembre de 2010

Invasión de camaleones.


Querido coetáneo.

De mil y un lugares ,llegaron para desplomarse a las orillas de nuestra bahía.
Como de costumbre la intriga nos sitió, no se si era curiosidad o sed de tener hambre, pero desde que llegó esta tómbola el insatisfecho afán se ocupó de controlar el resto.

Necesitamos meses,estaciones, aguaceros y vendavales para coaccionar nosotros a esa difuminación.Para barrer del todo los restos de la arena. Se nos olvidó que las palmeras eran nuestras! Expuestos al hechizo, siempre persiguiendo el darnos de si,a cada paso mas cerca de no tener figura, vacíos si no nos acompaña un atributo,individuo ya no es individual, erradicada quieren a la autonomía.

Invasión. Ya te lo dije, nos pillaron en pijama.
Los jardines fantásticos también se riegan con agua.
Te respondo: Si somos nuestro limite,porque siempre buscamos algo/alguien que lo dicte?
Radiografíate. Mírame a trasluz. Estas a tiempo de abortar camaleón.
Cuando estar a dieta consiste en alimentarse de los demás, invierte en tí mismo y no en este jodido cash converter.



                                                     Sr. Coeur Endurcis

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